Poco después del sismo, cuyo epicentro fue cercano a la prefectura de Fukushima, se emitió un aviso de tsunami que permanece vigente. Esta fue la misma prefectura donde un terremoto de 2011 causó un desastre en una planta de energía nuclear.
Los funcionarios de la Agencia Meteorológica de Japón también instaron a las personas en las áreas afectadas a que se mantengan alejadas de la costa.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) también reportó que la magnitud del sismo fue de 7,3 y se produjo a 63,1 kilómetros de profundidad. El epicentro se ubicó a 57,1 kilómetros al oeste suroeste de Namie, en la prefectura de Fukushima, y a 74,5 kilómetros al oeste noroeste de Watari, en la prefectura de Miyagi, indicó USGS.
Las autoridades avisan de que, en estos casos, lo más prudente es hallarse en un lugar seguro, situarse siempre debajo de una mesa en caso de que se produzca un terremoto de fuerte intensidad, y, ante todo, no estar en plena calle, pues ello puede suponer un grave peligro, más teniendo en cuenta el brusco movimiento de la superficie.