«Lupita», como le dicen sus clientes y familiares, se hizo viral porque el día de la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), ubicado, en el Estado de México, decidió irse a vender sus doraditas afuera del inmueble.

A través de redes sociales se difundió un video de «Lupita» vendiendo a las personas que se encontraban en el lugar y las cuales hicieron largas filas para poder comprar, debido a la falta de lugares que vendan comida.

La idea de llegar con su canasta de comida a la inauguración del AIFA fue, de su suegra, comentó en una entrevista realizada por La Silla Rota.

Dijo que una noche antes pusieron todo en orden y temprano tomaron su coche para emprender el viaje de casi 3 horas, desde el Valle de Toluca al nuevo AIFA.

Este miércoles, medios de comunicación le preguntaron al presidente López Obrador si se permitiría la venta de este antojito de manera permanente, en el AIFA. Él dijo que sí, en uno o dos locales fijos.

«Yo pienso que deberían (vender) en uno de los locales… aunque no les gusten las garnachas y las picadas y las tlayudas. O sea, ya quisieran, es lo más nutritivo que puede haber, lo más nutritivo, son carbohidratos, es proteína y vitaminas. Los nutriólogos saben de esto. Es la combinación, porque es el maíz es carbohidrato, el frijol es proteína y le ponen salsa y el queso que también es proteína», dijo el primer mandatario.

El presidente agregó que «lo que les pasa a nuestros adversarios es que su mundo es el de arriba, el de la pirámide, y piensan que eso es México. Por eso una señora vendiendo tlayudas en un aeropuerto lo ven como algo, sí, extraordinario, como algo indebido… no saben lo que son las tlayudas, deveras»

Conocidos en Toluca como «huaraches» y en Ciudad de México como «tlayudas», son el platillo que ha ayudado a María Guadalupe Piña Pichardo a mantener a su familia por más de 12 años.

Este miércoles, se le preguntó al presidente López Obrador si se permitiría la venta de este antojito de manera permanente, en el AIFA. Él dijo que sí, en uno o dos locales fijos.

«Yo pienso que deberían (vender) en uno de los locales… aunque no les gusten las garnachas y las picadas y las tlayudas. O sea, ya quisieran, es lo más nutritivo que puede haber, lo más nutritivo, son carbohidratos, es proteína y vitaminas. Los nutriólogos saben de esto. Es la combinación, porque es el maíz es carbohidrato, el frijol es proteína y le ponen salsa y el queso que también es proteína», dijo el primer mandatario.

El presidente agregó que «lo que les pasa a nuestros adversarios es que su mundo es el de arriba, el de la pirámide, y piensan que eso es México. Por eso una señora vendiendo tlayudas en un aeropuerto lo ven como algo, sí, extraordinario, como algo indebido… no saben lo que son las tlayudas, deveras»